En el área ocupacional se ha puesto en marcha el taller de cocina.  Una tarde a la semana, se dedica a realizar actividades relacionadas con la receta: redactarla, buscar información sobre los ingredientes, realizar manualidades, hacer fichas… La última semana del mes, se lleva a cabo la receta y, por supuesto, ¡se degusta!

Con esta actividad, son muchas las funciones cognitivas a trabajar. A nivel atencional, se potencia la sostenida y selectiva, así como la visopercepción y la memoria a corto y largo plazo. También se trabaja la lecto-escritura y la motricidad fina. Y por supuesto, la motivación y la socialización.

Cada mes nos centramos en un alimento. Este nos ha tocado la fruta y hemos disfrutado de una deliciosa macedonia. Y el próximo… ¡mes de la hamburguesa!